Es desgarrador pensar que a tu gato o perro le puedan diagnosticar cáncer, pero ampliar tus conocimientos podría muy bien salvar la vida de tu peludo amigo en el futuro.
Una preocupación creciente
Los gatos y los perros viven más que nunca. Sin embargo, el envejecimiento de la población de mascotas también ha provocado un fuerte aumento en los diagnósticos de cáncer. El cáncer es la principal causa de muerte relacionada con enfermedades en perros y gatos domésticos en Estados Unidos, con millones de gatos y perros diagnosticados con cáncer cada año. Más de la mitad de los perros mayores de 10 años se ven afectados, y los perros contraen cáncer aproximadamente con la misma frecuencia que los humanos, según la Asociación Médica Veterinaria Americana (AVMA). Sin embargo, la buena noticia es que se están logrando más avances en la atención médica en lo que respecta a la detección y el tratamiento tempranos.
Formas comunes de cáncer en mascotas
Existen casi 100 tipos de cánceres animales que su gato o perro podrían estar en riesgo de padecer, pero hay algunos que son más frecuentes en las mascotas.
- Tumores de las glándulas mamarias: son los tumores benignos y malignos más comunes en perros. No son comunes en gatos. Consulte a un veterinario para que examine a su mascota y determine si un tumor es maligno.
- Piel: Los tumores cutáneos son comunes en perros mayores, pero suelen ser benignos. En los gatos, tienden a ser malignos. Consulte a su veterinario para determinar si son cancerosos.
- Cabeza y cuello: La neoplasia (crecimiento anormal de tejido) en la boca es más común en perros. Las señales de alerta incluyen sangrado, dificultad para comer o un tumor en las encías. Tanto los gatos como los perros son susceptibles a la neoplasia dentro de la nariz. Las señales de alerta incluyen dificultad para respirar, sangrado e hinchazón facial.
- Linfoma: Neoplasia común en perros y gatos. Es un cáncer que afecta a los glóbulos blancos y se caracteriza por agrandamiento de los ganglios linfáticos, letargo, pérdida de peso y falta de apetito.
- Osteosarcoma: Mejor conocido como cáncer de hueso, es mucho más común en perros de razas grandes mayores de siete años. El cáncer de hueso es poco común en gatos. Los síntomas incluyen dolor, cojera o inflamación de los huesos o las articulaciones.
- Tumores abdominales: es un desafío hacer un diagnóstico temprano, pero la pérdida de peso y la hinchazón son síntomas típicamente asociados con los tumores abdominales.
Señales de advertencia
Si tiene un gato o un perro en casa, considere programar una cita médica para un chequeo y esté atento a cualquier indicio de que su mascota podría tener cáncer. Estas son algunas de estas señales de advertencia:
- Pérdida de apetito o dificultad para comer
- Pérdida de peso rápida
- Diarrea y/o vómitos
- Pérdida de interés en jugar o hacer ejercicio
- Dificultad para defecar o orinar, o cambios en la frecuencia de las deposiciones
- Rigidez anormal
- letargo severo
- Olores inusualmente fuertes o desagradables
- Sangre que sale de la boca o el recto
- Aumento de la sed y la micción.
- Cambios respiratorios
- Hinchazón anormalmente firme
- Masas a lo largo de la mandíbula o la línea de los dientes
- Heridas que no sanan
Prevención
Quizás no pueda prevenir el cáncer por completo, pero ciertamente puede hacer su parte para ayudar a que su mascota viva una vida larga, saludable y feliz.
- Esterilice a su mascota para reducir significativamente el riesgo de cáncer testicular o de glándula mamaria.
- Alimente a su mascota con una dieta nutritiva. La obesidad en perros y gatos es uno de los principales factores de riesgo de cáncer. Evite darle a su mascota demasiadas golosinas o restos de comida para mantener un peso saludable.
- Ejercicio. Sal y diviértete con tu mascota. Sal a dar largos paseos o excursiones de senderismo para que tu perro estire las patas. Haz que tu gato corra y persiga juguetes. El ejercicio regular puede ayudar a reducir el riesgo de obesidad, diabetes y cáncer en tu mascota.
- Mantenga una buena higiene bucal. Cepille los dientes de su mascota con regularidad y practique una buena higiene bucal para reducir el riesgo de cáncer bucal.
Casi la mitad de los cánceres son curables si se detectan a tiempo. Según la AVMA, la detección temprana es fundamental para curar el cáncer en mascotas. Afortunadamente, un diagnóstico de cáncer no es una sentencia de muerte. La mayoría de los cánceres se pueden tratar quirúrgicamente, y la quimioterapia y la radioterapia también son opciones. Su veterinario le ayudará a obtener un diagnóstico definitivo y a desarrollar un plan de tratamiento para restaurar la salud de su mascota.
Amamos a nuestras mascotas tanto como amamos a nuestra familia, así que hagamos todo lo posible para mantenerlas saludables.